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Miguel González
Hace unos días me llegó un amigo, de estos que asisten con orgullo a las asambleas del #15M y me comentaba ilusionado como iba el movimiento por Granada, hacia donde intentaban dirigirse y como buscaban separarse de los grupos políticos más radicales. Se quejaba del poco apoyo del profesorado en la revolución, ya que siempre suelen ser ellos los que alientan a cambiar lo que no funciona y ahora se veían desamparados de ese aval que les correspondía por tantos sermones aguantados. Acababa de redactar un manifiesto que iba dirigido principalmente al personal docente, pero yo personalmente creo que puede hacerse extensible a todos los adultos en general. El manifiesto ha sido repartido por las calles de la ciudad. Os lo dejo aquí, por si a alguien le incita a una reflexión.
Algunos nos enseñasteis
que la historia fueron personas como nosotros,
que saber es mucho más que las opciones de un test,
que las cosas son así mientras estemos parados,
que hay alambradas sin sentido,
que la tapicería del coche no es lo primordial;
que todo es relativo, incluso el fracaso
de quienes ya intentaron hacer algo con el mundo;
y también nos enseñasteis
palabras a las que aún les faltan letras,
el significado de las cifras cuando son personas,
la responsabilidad de ser conscientes,
el jaque a cualquier poder
con una tiza y nuestro asombro,
el valor de la iniciativa con todo en contra.
En realidad no pensabais que fuésemos capaces
y nosotros todavía no podemos creernos
que lo seamos y no estéis aquí
Emilio Palacios
4 comentarios:
Buenísimo!
¡Genial! Me consta que sí hay profes que apoyan; yo les apoyo y me emocionan cada día, me hacen sentir una inmensa alegría. ¿Sabes? Es como ver un grano de arena convertido en duna y una gota de agua en mar. Estamos aquí, con ustedes.
Mi apoyo incondicional desde siempre.
Un profesor, es uno y no todos ni unA parte, es importante matizarlo. Un profesor es una persona, dotada de ciertos atributos, como tú, el otro y yo. Y si es majo, mucho mejor.
Yo viví el mundo de los pnns en los años 70. Nos pidieron ayuda a los alumnos, y se la dimos. La síntesis: nos dejaron tirados cuando lograron, en parte sus propósitos.
Moraleja: tuve muy buenos maestros y amigos, así como malos e indecentes; otros, indiferentes o asepticos. Por eso hay que saber con quien estamos, y como se sitúan, para no llevarse a engaños. Por lo demás, hermoso texto. Saludos
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